El amor es como los zapatos, hay alguno que aprieta y te acostumbras a él . Pero los hay que se adaptan a tu pie y no te hacen daño desde el primer día. Pero los hay también que te hacen menos daño y te adaptas a ellos. Y también hay algunos que te van pequeños y te los pones igual, aunque haces unos arreglos en el zapatero para que te los dé de sí. A mí normalmente me gustan por el color y los primeros fueron unos zapatos de charol rojos  pues éstos zapatos fueron los primeros que me hicieron daño y me quedaban muy bien con una falda corta de piel que llevaba con una chaqueta de piel negra. siempre dicen las madres que para presumir hay que sufrir. Pues yo tuve que sufrir para poder llevarlos hasta que mis dedos no aguantaron más, porque en cambio el zapato estaba nuevo y no se estropeaba y porque me había enamorado desde el principio. Eran tipo de salón y acababan en punta. En cambio yo tengo el pie más bien ancho y me quedaban estrechos pero estaba ciega por ellos y los quería llevar igual con todo, ya sea con una falda de piel ó con un pantalón pitillo y encima como eran de charol me apretaban mucho más que ninguno. Pues ahora se han vuelto a poner de moda otra vez los zapatos de charol, pero no sé si comprarme unos o no. Pero creo que me los compraré porque puedo escoger con cual me quedo, no tengo que decir que sí enseguida como me pasó la primera vez. He visto unas botas de charol en el Zara y me las tengo que probar,  pero cuesta de probarlos porque me hicieron mucho daño los zapatos rojos y todavía me da miedo. Pues ahora ya voy tirando todos los zapatos que me van grandes o pequeños, porque es sufrir por sufrir. Este año me compré unos mocasines de ante y me encantan, ni me aprietan ni me vienen grandes, se ajustan perfectamente a mi pie. Por lo tanto, si que encuentras el zapato si lo buscas, porque hay que escoger y probar, como en las parejas y los hay que aprietan y los hay que te van grandes y los hay que tienes que adaptarte a ellos . Ahora ya no me enamoro del zapato por su color, sino por su calidad y el color es lo menos importante.